Antes de empezar a hablar de adelgazamiento, hay que tener en cuenta que el proceso de pérdida de peso no depende únicamente de la alimentación o de la práctica de alguna actividad física, sino de varios factores que deben influir directamente en el cambio de hábitos. Por eso, si querés adelgazar, el primer paso es estar dispuesta/o a cambiar tu comportamiento.
Te damos algunos consejos para adelgazar:
1- Consumí alimentos que desinflamen
Los alimentos ricos en omega 3 pueden ayudar en el proceso de adelgazamiento, ya que tienen acción antiinflamatoria. Este tipo de acción es muy beneficiosa para quienes entrenan o realizan deporte, ya que alivia los dolores musculares, producto del ejercicio. Entre estos alimentos que ayudan a adelgazar se encuentran los pescados como el salmón, el atún, la sardina, las semillas de lino y las castañas.
2- Aumentá la sensación de saciedad
Aumentando la sensación de saciedad, las ganas de comer fuera de hora o de consumir alimentos más grasosos disminuirán considerablemente, lo que te ayudará a adelgazar. Para eso, podés invertir en alimentos ricos en fibras, ya que dan la sensación de saciedad por más tiempo. Podés encontrar fuentes de fibra en frutas; cereales integrales como avena y la cebada; en legumbres como lentejas y garbanzos y en verduras de hoja verde.
3- Hacé colaciones entre las comidas
Pasar largos períodos de tiempo sin comer es uno de los principales errores que comete quien quiere adelgazar; por eso, no cometas ese error y hacé tres comidas principales –es decir, desayuno, almuerzo y cena– y tres colaciones entre ellas: la primera en la mañana, la segunda en la tarde y la tercera después de cenar. De esta manera, mantendrás tu metabolismo funcionando durante todo el día, te sentirás satisfecha/o, disminuirán las ganas de comer fuera de hora y evitarás exagerar en las comidas. Es importante señalar que el intervalo entre las comidas principales y las colaciones debe ser de al menos 2 horas, y que las colaciones deben estar compuestas por alimentos saludables, como frutas, verdura y proteínas magras.
4- Practicá actividad física con alto nivel de quema de grasa
De acuerdo con investigaciones, para que una persona sea considerada activa, lo ideal es practicar al menos 2 horas 30 minutos por semana de ejercicio para bajar de peso. Por lo tanto, si hacés al menos 1 hora de ejercicio físico, de preferencia aeróbico, habrás cumplido con más de lo recomendado, pudiendo quemar más calorías.
De esta forma, el proceso de adelgazamiento será aún más rápido y aportará al ajuste en la alimentación, ya que podrás definir tu cuerpo, fortalecer los músculos e incluso mejorar tu condición física y bienestar. Entre las actividades aeróbicas que más resultan sugerimos caminar o correr, así como la Zumba si te gusta bailar, el Spinning, el Entrenamiento Funcional que trabaja en intervalos y alta intensidad, entre otros.
5- Acelerá tu metabolismo
Los alimentos que aceleran el metabolismo y colaboran en la pérdida de peso son conocidos como termogénicos y actúan de dos formas: estimulando la quema de grasa y acelerando el metabolismo. Además, proporcionan más energía y disposición para practicar actividad física. Los principales termogénicos naturales son pimienta, té verde, canela, jengibre y café.